Se paró, vino hacia las cabinas que estaban ubicadas en la platea del club Comunicaciones. Miraba de reojo, como buscando a alguien, hasta que un colega lo reconoció, "es el tano Daquarti " avisó. Aquel hombre, abrigado hasta la cabeza, fue un gran atacante que integró aquella formidable delantera, que gustaba y goleaba a sus rivales.
Pactamos una nota, que aceptó con gran alegría. En el reportaje que realizamos por Voces de Chicago (jueves 20,00 hs. en AM 690 K24 en radio) nos dijo que llegó a Chicago proveniente de San Lorenzo de Almagro, junto con López. El era centrodelantero, puesto que resignó para darle lugar a Julio San Lorenzo, corriéndose hacia la punta derecha. Recordó lo grato que era jugar con semejantes compañeros, y que todavía no se puede explicar porqué ese equipo no salió campeón. Le preparamos una sorpresa, desde Santiago Del Estero lo saludó el "gran " Julio San Lorenzo, lo cuál lo puso muy contento, estuvieron hablando un rato de sus cosas, y pactaron un encuentro en Santiago, cuando Alberto vaya para las termas. Se despidieron, y los dos agradecieron el buen momento vivido.
Daquarti, tímidamente, nos dijo que le gustaría ver a Nueva Chicago en Mataderos, le prometimos que haríamos la gestión para que pueda entrar al estadio sin problemas. Me quedé pensando lo poco que recordamos a nuestros ídolos. Es una asignatura pendiente, que hay que rendir, los jóvenes hinchas deben saber y reconocer a las glorias que nos antecedieron, para que nunca más haya un "tano" perdido en la ciudad.
