martes, 15 de febrero de 2011

Peras al olmo?


El viejo dicho nos enseña que no le podemos pedir la reconocida fruta al árbol equivocado. Algo parecido sucede en nuestro club.
Los encargados del fútbol profesional (Lacanna, Caruso y Mastroianni) no han cosechado mas que fracasos en los 30 meses de gestión sumados a permanentes papelones, pero que no es mas que la consecuencia de haber sembrado inexperiencia, falta de conocimiento y el hecho de que nadie los conoce en el ambiente del fútbol. Recordemos que sólo Lacanna goza de una pobre experiencia en el ambiente cuando participó del armado del equipo de 2004 que descendió al Nacional varias fechas antes de finalizada la temporada.
Es por eso que no nos causa tanto asombro los fracasos de las campañas ‘08/’09 y ‘09/’10, siendo que en esta última trajeron 14 refuerzos y apenas logramos un magro 13º puesto en la “B” Metropolitana. Esta situación se ve agravada por el vaciamiento del patrimonio social con la pérdida, regalo y malas ventas de jugadores.
Esta incapacidad y falta de conducción de la actual gestión se ven atenuados, en este momento, por la llegada de Mario Finarolli y su excelente campaña de casi 15 partidos sin perder, manteniendo al equipo en lo mas alto de la tabla de posiciones.
Si nos permitimos utilizar otro recurso lingüístico para explicar esta situación, podríamos decir que “no se puede tapar el sol con un dedo”.
Los responsables del fútbol profesional no pudieron con su genio y recientemente protagonizaron un verdadero papelón en la contratación de Petrovelli, que aún no ha sido resuelto con nuestros pares de Central Córdoba. Una vergüenza. Pero la frutilla del postre es el caso Nicolás Sánchez (foto). Como es de público conocimiento, Nico fue a River por el 50% del pase y los derechos federativos, con el compromiso de que en una futura venta, Chicago recibiría U$S 1.000.000 por el resto del pase que tiene en su poder. En nombre del campeonato económico “que nunca existió” de Lacanna se vendió la mitad de los que nos quedaba del pase a “un grupo de inversores fantasma” en U$S 250.000 y todos éramos felices, esperando la ansiada venta. Pasó el tiempo y el castillo de arena de Lacanna se derribó cuando el equipo de Passarella resuelve dejar libre al jugador. Previamente, los de Núñez le habían ofrecido a Lacanna U$S 250.000 por el 25% real del pase pero éste lo rechazó, reclamando también la parte del “grupo inversor fantasma”. ¿Por qué hizo esto? No es que estamos en una profunda crisis económica y necesitamos del dinero? Porqué maniobra como si defendiera los intereses del “grupo inversor fantasma”? Qué tienen que ver con Chicago? Quienes son? La cosa es que Chicago se quedó sin lo uno ni lo otro…
Que tristeza provoca escuchar al presidente de nuestro club rodando por cuanto medio radial de ascenso nacional hay, llorando porque nadie le presta atención, no lo conocen, no lo ayudan y lo ignoran. Hasta la AFA misma dijo que no se mete en este tipo de relaciones entre los clubes y que Chicago debe resolverlo directamente con River, mediante la justicia ordinaria. Quizás ahí tengan mas suerte ya que siempre enrostraron a los socios sus profesiones, que muy poco le fueron de utilidad a los intereses de Chicago. Lo único que falta es que ahora digan que van a contratar abogados privados para enfrentar la situación!
Esta es la consecuencia de una aventura de gente que ganó una elección sin saber lo que iban a hacer, ni tener un plan de gobierno, ni pertenecer al mundo del fútbol. Pensaron que esto era fácil. Si no fuera por Mario Finarolli, a esta altura estaríamos contando otro final en lo deportivo.
Por suerte este año se termina esta gestión y esperamos que puedan llegar al club socios que entiendan de fútbol porque debemos volver urgente al Nacional. Una vez más fracasó la gestión de los millonarios omnipotentes que venían a salvar al club, se acerca la hora de los socios…